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Resumen:
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En los últimos años muchas empresas han adoptado códigos de conducta en el marco de la “responsabilidad social”, en los que recogen principios fundamentales en el trabajo y derechos laborales, que se comprometen a respetar respecto de sus trabajadores, y a exigir o promover su cumplimiento a proveedores y subcontra¬tistas, en cualquier país en donde presten actividad. Por lo general se ha sostenido que se trata de “soft law”, declaraciones unilaterales que expresan valores de las empresas, sin mecanismos coactivos para su aplicación. Algunos de estos códigos se han recogido en negociaciones colectivas, en particular en acuerdos marco mundiales. En este libro se analizan los tipos y contenidos de estos códigos de conducta, y en particular la cuestión de su eficacia jurídica, esto es si caben las acciones para exigir a las empresas su cumplimiento y para responsabilizarlas por incumplimiento. Si la respuesta es afirmativa la relevancia de estos instrumentos es clara teniendo en cuenta que pueden funcionar como mecanismos para elevar los mínimos exigidos por la legislación, y promover el cumplimiento de las normas laborales en el mundo. En esta obra también se consideran las acciones de nuevos actores (grupos de consumidores, ONG, etc.) no sólo en el campo del “derecho blando” sino también en el terreno jurídico, tendientes a que las empresas requieran el cumplimiento de estos códigos a proveedores y subcontratistas. El libro aborda además otras temáticas relacionadas con estos instrumentos, como la universalización de los derechos laborales, y los nuevos mecanismos jurídicos para hacer respetar los derechos laborales.
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